Si eres amante del café, sabrás que su aroma tiene un poder casi mágico: despierta los sentidos y mejora el ánimo al instante. Ya sea en casa o en el trabajo, una taza de café siempre es un buen plan.
El café nos acompaña en diferentes momentos del día: nos ayuda a mantenernos despiertos en plena jornada laboral, es el mejor cómplice para una conversación entre amigos y la excusa perfecta para alargar una sobremesa familiar.
Entre la gran variedad de cafés que existen, hay uno que destaca como el más icónico de la tradición italiana: el cappuccino. Su cremosidad y equilibrio de sabores lo convierten en un imprescindible para los cafeteros. En Ufesa, tenemos una variedad de cafeteras espresso que harán que preparar tu cappuccino sea de lo más fácil.
Cómo preparar un café cappuccino en casa
La base del capuchino es un buen espresso. Si tienes una cafetera espresso o de cápsulas, tendrás gran parte del trabajo hecho. Pero, ¿qué diferencia al capuchino del espresso? La clave está en la leche y su espuma.
El secreto de la espuma perfecta
Para conseguir una textura cremosa y densa, lo ideal es usar leche fresca entera. Su mayor contenido en grasa ayuda a crear una espuma más estable y aterciopelada. En cambio, con leche desnatada la espuma se deshace con más facilidad y no tendrá la misma consistencia.
Otro truco importante: la leche debe estar fría antes de espumarla, ya que así tendremos más tiempo para trabajar su textura.
Paso a paso para espumar la leche
- Llena la jarra hasta la mitad con leche fría.
- Introduce la boquilla de vapor en la leche de tu cafetera espresso.
- Inclina ligeramente la jarra y activa el vapor.
- El secreto está en las burbujas: deben ser muy pequeñas para lograr una espuma uniforme. Si son demasiado grandes, vuelve a darle vapor hasta conseguir la textura deseada.
- La leche debe alcanzar unos 60°C (cuando la jarra queme al tacto, estará lista).
Montaje del cappuccino
Vierte la espuma de leche sobre el espresso y observa cómo se forma la característica mancha blanca en la superficie. Si quieres añadir un toque artístico, usa un palillo para dibujar figuras o espolvorea un poco de cacao o chocolate rallado. ¡Listo para disfrutar!
El origen del cappuccino
Su historia es un tanto incierta. Algunas versiones lo vinculan con la Orden de los cappuccino, mientras que otras lo sitúan en Austria en el siglo XVIII. Lo que sí sabemos es que su popularidad se disparó en el siglo XX y que, gracias a las cafeteras espresso con boquilla de vapor, hoy podemos prepararlo en casa con la misma calidad que en una cafetería.
☕ Y tú, cómo prefieres tu cappuccino? Cuéntanos tu truco o toque especial. 😊
